Destination wedding hacemos bodas en cualquier sitio del mundo

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Cada boda que preparamos tiene un brillo especial. En el caso de Claudia y Jo, desde que contactaron con nosotros para que fuéramos sus wedding planners supimos que íbamos a vivir toda una aventura al organizarla, porque querían… ¡una destination wedding en Tarifa!

Las destinations wedding son esas bodas que se celebran lejos de casa, en cualquier lugar nacional o internacional que tiene un significado especial para los novios. Son bodas emocionantes que en sí cuentan una historia, y por eso nos gustan tanto.

Claudia y Jo se enamoraron en Tarifa, Cádiz, y por supuesto no imaginaban otro sitio donde darse el sí quiero. Además, tenían claro que querían celebrarlo en uno de los lugares más molones de toda la costa gaditana… ¡El Tumbao! El bar más buenrollero de todo Tarifa, pero que tenía solo una pega: nunca se había celebrado una boda allí.

Así que con el reto de organizar una destination wedding para dos novios muy especiales para nosotros, nos pusimos manos a la obra.

El paso a paso de organizar una destination wedding

Marcar en el calendario la fecha de la destination wedding

Lo primero en este caso fue elegir una fecha ideal para la boda en Tarifa, porque allí el viento puede ser muy intenso, y no queríamos que saliera todo volando en un día tan mágico. Así que, con la ayuda del novio, que conocía la climatología tarifeña como nadie, hicimos un estudio meteorológico y optamos por que se celebrara en mayo de 2022. Con el día más bonito de sus vidas marcado en el calendario, fuimos a por el siguiente paso: dónde y cómo la magia se haría realidad.

Una ubicación de ensueño para una boda mágica lejos de casa

Los novios tenían claro el dónde: una ceremonia sencilla en primera línea de playa en Tarifa, en El Tumbao, al atardecer. Pura magia. Con el Océano Atlántico de fondo, con unos sencillos bancos de madera, alfombras de rafia y una pequeña caminería de flores blancas y faroles de mimbre conseguiríamos el ambiente bucólico que envolvería a aquella ceremonia tan mágica…

Hasta ahí todo perfecto, pero cuando nos contaron dónde querían realizar la celebración… ¡nos dimos cuenta de que no era viable! Esta boda contaba con 300 invitados, que por mucho que medimos no cabían donde ellos querían. Así que dimos mil vueltas por Tarifa, preguntando, investigando, analizando… hasta que volvimos al punto de partida y nos dimos cuenta de que la solución había estado frente a nuestros ojos todo el tiempo. El parking de El Tumbao.

Donde otros solo veían un descampado nosotros ya veíamos una carpa, flores, luces, velas, cóctel, baile. Cuando se lo contamos a los novios, al principio pensaron que estábamos locos, pero enseguida se dieron cuenta del potencial de aquel lugar, que no solo estaba al lado de la ceremonia, sino que además tenía unas preciosas vistas al mar y era lo suficientemente grande para que pudiéramos hacer nuestra magia. Así que ya teníamos el lugar de celebración para una boda inolvidable.

La decoración de una destination wedding única

Pronto empezamos a trabajar en el proyecto de decoración. Claudia sabía que quería algo muy natural y que fuera mucho con el entorno… tenía que ser desenfadado, pero súper bonito. Así que diseñamos una carpa tensada color arena donde los pilares estuvieran tupidos por lentisco, planta que se encuentra en todos los campos de la costa gaditana.

En las mesas, cientos de velas en diferentes alturas acompañadas por guirnaldas de olivo. Mesas y sillas de madera darían al escenario ese toque natural que los novios querían.
La iluminación era otro punto muy importante en este escenario: pequeñas bombillas formando guirnaldas por el techo de la carpa y focos iluminando la decoración de las columnas junto con la mágica luz de las velas conseguirían un ambiente de cuento…

Un catering divertido y desenfadado para poner la guinda a una “boda de destino” en Tarifa

Para el servicio de catering, Claudia y Jo querían algo también desenfadado y divertido. Habían ido a varias bodas donde el Huaso había servido sus típicos asados y lo tuvieron claro. Así que después de un rico cóctel, los invitados disfrutarían de carnes argentinas hechas en enormes parrillas y trinchadas en directo con ricos condimentos, ensaladas y guarniciones…

Y después, como no podía ser de otra manera, un fiestón amenizado por DJ Maikol y Les Castizos. Porque no había mejor manera de terminar esta boda de ensueño en Tarifa que bailando con el mar de fondo hasta que el cuerpo aguante.

Esta boda inolvidable (también para nosotros) fue posible gracias al trabajo de los increíbles profesionales que nos acompañaron para dar forma a cada idea, cada sueño. Fue un trabajo intenso pero que mereció la pena. No se nos olvidará nunca la sonrisa de Claudia, que lucía un impresionante vestido hecho en su propio atelier (que tanto nos gusta): una de las novias más bellas y auténticas que hayamos visto nunca.

Si tú también quieres que hagamos realidad esa boda con la que sueñas desde hace tiempo, aunque sea lejos de casa… ¡con nosotros es posible!